jueves, 11 de marzo de 2010

Los listillos y las manos tontas

La mano tonta se hace llamar… el qué? Bueno, os cuento un poquillo cómo va lo que hasta ayer sólo conocía de oídas…


Resulta que los egipcios, ni cortos ni perezosos ellos, y con la represión que tienen en este país, pues aprovechan cualquier momento tonto, en sitios llenos de gente o no tan llenos, para rozarse con las mujeres… pero de forma disimulada, como si por error se toparan contigo… La primera vez que me pasó fue al poco de llegar, estaba en un centro comercial y subiendo las escaleras un tío joven se dejó caer encima de mi corva, la corva! Ya me dirás tú el atractivo sexual que eso puede tener… pero es lo que tiene la represión, que a poco que te dan te conformas y te tiras como un loco… Sigo. El tío el caso es que iba subiendo las escaleras detrás de mí y me pidió perdón, lo deje pasar, hasta que empezó a seguirme planta por planta por el centro y acabé gritándole porque no veía mejor forma de deshacerme del intruso… Una.

Segunda… aquí ya va haciendo un calor de justicia, esta semana estamos teniendo más de 30 grados así que lo de llevar manga larga por la calle durante el día es una pesadilla… a tirar de manga corta. Consecuencias? Es nocivo para la salud utilizar manga corta en este desastre de país… Por la mañana, recatados hombres que trabajan en el Ministerio se giran conforme me ven venir con mi camisetita de manga corta… unos 15, así que me armo de valor para decirles perrerías que no dan abasto a salir de mi boca y me quedo más ancha que larga cuando por fín terminan mirando a otro lado…

Tercera. Quedo con Pepe a comer, así que quedamos en un punto intermedio para ir juntos a por un Koshary… voy andando y hablando por teléfono con él y 5 zagales de mi edad empiezan a decirme cosas, pero como llevo la música ni puñetero caso, hasta que paso por al lado y me tiran del pañuelo que llevo al cuello… mi intención, girarme y pegarles un getazo. Mi reacción, más comedida, porque él no saber cómo es eso de que una mujer le pegue a un hombre en este país me hace actuar diferente… hasta las narices estaba ya de este día machista y de gente que se comporta como si de animales en celo se tratara porque se ve que no han sabido leer bien lo que su Biblia les quiere decir… burros, estos son burros.

Cuarta. Harta de tener que ir por la calle y aguantar la insolencia, descaro e intolerancia de la gente es poco. Vamos a Ramses, a la estación de trenes a comprar unos billetes y, a la vuelta, al metro. Los pasillos son largos y están en obras, pero nada como para tener que ir pegados unos con otros… así que ahí vamos Pepe y yo, por nuestro ladico de pasillo y como siempre, hablando sin prestar atención alrededor más de la justa. Uno, pasa, me roza el muslo y me coge la mano. ¿? Dos. Pasa otro y hace exactamente lo mismo, y quien dice me toca el muslo, dice toca lo que pilla. Así que no pude más, era mucho para un día, me di la vuelta y empecé a decir lo primero que salía de mi cabeza sin saber bien qué era sólo que hizo que los 2 manos tontas se pararan en seco y escucharan sin inmutarse las cosas que les decía… y bueno, pues luego te das cuenta de que hay gente buena, que daban la cara por los 2 impresentables que pasan el día rozándose con mujeres y son otros quienes se disculpan sabiendo que es que es lo que les toca aguantar… pero hasta qué punto llega esta sociedad? No tiene respeto por nada, por las mujeres está claro que es nulo, que no tienen nada que decir ni que hacer en una sociedad que en vez de mirar al futuro e intentar buscar una globalización de culturas lo que hace es encerrarse más en sí misma, ser más intolerante con el resto del mundo y ser los causantes de que exista el racismo hacia/por/para con los árabes/musulmanes. Uno no es racista en base al color de piel o a la religión que otro profesa, uno es racista cuando te das cuenta que gran parte de una sociedad que tiene en común una religión o un tono de piel no es respetuosa con el mundo que le rodea e intenta imponer sus costumbres a los demás. Y la pena, es que este país cuenta con gente muy buena, humilde, educados y de mente abierta, pero hay muchos que hacen que esa imagen se emborrone y prevalezca siempre la parte mala que es la que por desgracia abunda la mayor parte de los días, o al menos en mis días.

Este sitio no es para mí.

2 comentarios:

Els dijo...

oh oh... Lo siento Noelia. Yo tambien he notado el incremento del salimiento a raiz de las temperaturas y de dejar los abrigos y las chaquetas en casa. Ya van dos taxistas que me dicen jabibi mientras no paran de mirar por el espejo. Y eso no me pasaba hace un mes... Que pena :)

Unknown dijo...

Esto en verano va a ser insufrible!!! Y yo pensando en playas, bikinis y sol... que difícil va a estar!!!