viernes, 27 de noviembre de 2009

Keops, Kefrén y Micerinos

Después de más de un mes viviendo en Egipto por fín me he decidio a ir a ver las Pirámides, aunque he tenido que esperar a Pepe para ello...


Ir desde el centro no resulta muy difícil, aunque tuvimos que parar a 3 taxis para que nos llevaran... y por 10 libras más 25 minutos de camino conseguimos llegar al establo de camellos y caballos.


No sé por qué saben que somos españoles, y el caso es que cuando nos ven nos saludan con un "hola hola Pepsi Cola!", ridículo, pero así es... así que nos pasamos el día entero escuchando lo de "españoles!, hola hola Pepsi Cola!".

Por 40 libras egipcias más conseguimos un camello para cada uno y un guía, y ahí empezamos el camino hacia las Pirámides, a galope sobre Madonna y Michael Jackson.



Una vez dentro del recinto nos encaminamos hacia Micerinos primero, la más pequeña de las 3 pirámides, parando de vez en cuando para echar unas fotos. La sorpresa que nos llevamos fue que si vas montado en camello o caballo no te dejan acercarte a las pirámides, bueno, mejor dicho, te dejan pero pagando a las mafias que hay junto a cada una de las pirámides... pero nosotros, españoles y cabezones, allá que le insisitimos al guía para ir a Micerinos y echarnos alguna foto de cerca... y seguimos a Kefrén, pero ahí ya no nos salvamos... llegó un gorila que empezó a gritarle al guía y al final tuvo que amoquinar para que nos nos dijeran nada... aunque tampoco pudimos acercarnos! Total, que Pepe iba quemado por las situaciones que hay que pasar, y yo cabreada porque no me dejaban bajarme del camello a echar fotos en las pirámides... pero bueno, después de Kefrén terminamos el viaje en camello y echamos a andar de vuelta a Keops y a la Esfinge, así que al menos pudimos acabar el día un poco más tranquilos, pero es que aquí lo de salir a cualquier sitio es un estado continuo de nervios que cuando no es por el tráfico y el escándalo es por los egipcios que intentan sacar partido de cualquier cosa! Así que iremos sorteando los días como podamos que esto no ha hecho más que empezar!

1 comentario:

Teresa dijo...

Esa Meseta es un espectáculo increible. No podía cerrar la boca delante de la Gran Pirámide, se me pone la piel de gallina solo de recordarla.